El durmiente sirviente

La noche si que era fría, el invierno daba su mejor espectáculo, una capilla albergaba a hombres fuertes y corajudos, reunidos todos por un retiro espiritual, escuchando atentos al párroco de la capilla la historia de aquella noche también fría, donde Jesús orando en un monte a su Padre antes de la captura que hicieran los canallas hombres judíos de aquella epoca; pero la parte que escuche con atención fue cuando los discípulos dormitaban por el cansancio de las predicas, mi pensamiento iba en lógica y me preguntaba con gran rechazo, por que los discípulos estos hombres no estaban despiertos en tan importante momento, cuando el maestro iba a ser capturado por esta turba, el maestro estaba en peligro inminente, acaso no sabían de los planes de estos hombres?, la verdad si que me parecia una falta de responsabilidad por parte de los discípulos, cuando el párroco termino la historia paso anunciar que nos impondría la mano sobre la cabeza a cada uno para darnos su bendición, y rezar por nuestras almas, eramos muchos casi mas de 80 y yo estaba en el predilecto número 70, nos pidieron orar con la cabeza abajo, entre los pensamientos y oraciones que desarrollaba... yo no habría hecho lo que los discípulos hicieron, de recostarse y dormir mientras en maestro estaba en esa situación; pasaron minutos eternos antes de que el párroco viniese a mi, la noche me dio una serenata y caí dormido, el profundo sueño era inevitable, largas horas de escuchar predica, conversaciones en el día, jornadas de oración todo era mucho para un cuerpo mortal como el mío, de pronto sentí en mi cabeza unas manos calientes, el sobresalto llego, caray no lo sentí era el párroco dándome su bendición, me asuste mucho pero había una voz rondando que me decía "sirviente...sirviente", pronto entendí la lección que me dieron los ángeles, caray critique a los maestros también con mi lógica segmentada y no profundice en el pensamiento, tanto así de no entenderlos, este sirviente durmió donde debió estar despierto.